La Jornada
La justicia especial de paz imputó ayer a ocho (8) excomandantes de las antiguas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) por crímenes de guerra y de lesa humanidad en el caso de secuestro. Se trata de la primera decisión judicial de este tipo tras la firma de un acuerdo de paz en 2016.
La decisión vincula a la cúpula de las extintas FARC: Rodrigo Londoño Echeverry, quien dirige el partido político creado tras la firma de la paz, los congresistas Julián Gallo y Pablo Catatumbo y otros exjefes como Pastor Alape, Milton de Jesús Toncel, Juan Ermilo Cabrera, Jaime Alberto Parra y Rodrigo Granda Escobar.